Una heroína trágica, sí, pero cuya historia no parece ser tal cual la describieron Esquilo y Eurípides.     Un clamor a un mejor porvenir en medio de las adversidades y vicisitudes.    A pesar de estar contada en clave de comedia, el monólogo da pistas subrepticias de una gran catástrofe elaborándose cuidadosamente bajo la superficie, creando angustia y desasosiego.   Única función en un agradable espacio multicultural ubicado en una casona típica del barrio de Almagro.  Entradas y reservaciones en www.alternativateatral.com

«Kassandra», la mítica heroína troyana, que se reinventa en el texto del dramaturgo franco-uruguayo, Sergio Blanco, llega a Buenos Aires, personificada por la actriz venezolana, Sara Valero Zelwer, dirigida por Daniel Dannery para relatarnos las peripecias de una mujer trans, inmigrante, que habla un inglés mal hablado, vende productos de contrabando y ofrenda su cuerpo para sobrevivir.  Una historia de resiliencia, que no parece ser tal cual la describieron Esquilo y Eurípides.  «Life is a tragedy, but…Bugs Bunny!»

Sara Valero Zelwer, se especializó en Buenos Aires, en Teatro de Objetos, Interactividad y Nuevos Medios.  Se formó en teatro con Guillermo Angelelli, Emilio García Wehbi, Ana Alvarado, César Brie, Vivi Tellas, Julieta Carrera, Mauricio Kartun y en danza con Pablo Lugones, Isa Soares, Ana Frenkel y Alina Ruiz Folini . Participó como actriz y performer en distintos trabajos.   Asistió a seminarios con Roberta Carreri y Eugenio Barba. Licenciada en Artes de la Universidad Central de Venezuela. Completó su preparación en el Programa de Formación del Taller Experimental de Teatro TET (Caracas, Venezuela, 2009).

En 2018, retornó a Caracas, desde Buenos Aires.  Y, de inmediato, se incorporó a las actividades teatrales, trabajó con diversos directores de teatro, lo que le permitió obtener el premio a la Mejor Actriz Principal, otorgado por la Asociación Venezolana de la Crítica Teatral.   Y, además, fue nominada al premio Marco Antonio Ettedgui, otorgado por la Fundación Rajatabla, agrupación teatral venezolana, de amplia trayectoria en la escena latinoamericana, que fue creada por el director argentino, Carlos Giménez.   En la actualidad, trabaja en el proyecto de archivo digital de artes escénicas «El recuerdo del futuro» junto a la actriz, directora, docente y productora teatral, Areani Rondón.       Forma parte de Teatro en Red, un laboratorio de creación escénica remota con miembros en más de siete países. Es cofundadora de «El recuerdo del futuro», una iniciativa que tiene como objetivo la creación de archivos teatrales en entornos digitales.  Forma parte de Teatro en Red, un laboratorio de creación escénica remota con miembros en más de siete países diferentes.

LAS CONFESIONES DE SARA

La actriz nos brinda una revelación, al decir que con Kassandra se descubrió mejor actriz que antes, gracias al trabajo con el director venezolano Daniel Dannery, quien generó las condiciones y la inmensa libertad de acción, para que ella confiara en su instinto y simplemente se dejara llevar por su propia intuición.    «En los ensayos de Kassandra -Sara Valero Zelwer, dixit- se apersonaron sin pudor los gags de los Looney Tunes, las guarradas de todas las travestis y trans que había visto en mi vida y hasta por momentos, los gestos tiernos de un Marcel Marceau que vi a mis 9 años en la sala Ríos Reyna (Complejo Cultural Teresa Carreño, de Venezuela).   Esa libertad hizo aparecer el canto ritual a la pija gigante de Menelao en una ronda, invitando a todos a vociferar: BIG DICK.  La imagen se hacía cuerpo porque la confianza de Daniel (Dannery), era inmensa».  

«Kassandra es excesiva, su culo de goma espuma es excesivo, como su boca, como su historia.  (…)   Kassandra fue el regalo para el que me estuvo preparando el camino desde hacía mucho tiempo y yo no lo sabía.  Sentí el guiño desde el libreto la primera vez. Ella iba a encarnarse con las tardes de chupar dedo mientras mi papá (Armando Valero) me leía mitología griega. Con los ligueros, lentejuelas y pestañas postizas de todos el campo y los musicales que mamé de la teta cultural. Con todas las canciones que cantamos en lipsync a pulmón.   (Vale acotar, que Sara Valero es hija de Manuelita Zelwer, docente y reconocida actriz venezolana y del periodista, fotógrafo y cineasta, Armando Valero, uno de los fundadores de la revista Reventón, mayo de 1971, un parteaguas: un antes y un después en el periodismo venezolano).